SERVID A DIOS CON ALEGRIA
“Servid a Dios con alegría, venid ante su presencia con regocijo”. Sal.100:2.
Los que hemos experimentado la vida mundana, fácilmente podemos diferenciar entre el servirle a Dios y el servirle al mundo.
Referente a esto, Dios le dijo a Israel en el reinado de Roboan por medio del profeta Semaías cuando Israel había dejado los caminos de Dios: “Pero serán sus siervos (de los egipcios), para que sepan lo que es servirme a mí, y que es servir a los reinos de las naciones”. 2Cr.12:1-(8)-12.
Por esto dije fácilmente podemos diferenciar el servicio a Dios y al mundo.
Estoy seguro que muchos no queremos ni recordar nuestra vida pasada fuera de Dios, porque eran tiempos de alegría aparente, falsedad, hipocresía, perdición, etc.
Nuestra esclavitud era de dar lastima; pero de ese pozo cenagoso y bagaje mundano ¡CRISTO NOS HIZO LIBRES!
Ro.6:20-23, dice: “Porque cuando erais esclavos del pecado, erais libres acerca de la justicia - ¿Pero qué fruto teníais de aquellas cosas de las cuales ahora os avergonzáis? Porque el fin de ellas es muerte – Más ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna – Porque la paga del pecado es muerte, más la dadiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro”
Todo esto es más que motivo para vivir en exuberante alegría. Es la única razón, es un principio divino que está en nuestro corazón.
De allí que el Sal.100:2 dice: “Servid a Dios con alegría, venid ante su presencia con regocijo”
Del mismo modo Ro.12:11 dice: “En lo que se requiere diligencia, no perezosos, fervientes (con entusiasmo) en espíritu sirviendo al Señor”.
No debemos dejar que la tristeza nos agobie, menos la mala gracia oh la mala voluntad para servirle al Señor.
Debemos hacerlo de todo corazón, de buena voluntad y con mucha alegría: “Porque el gozo de Jehová es nuestra fortaleza” Neh.8:10b.
Vale la pena decir que si estamos bien con Dios, debemos estar llenos de alegría en su presencia como siervos de Dios. Porque si sucede lo contrario: Tristeza, mala gana oh mala voluntad para servirle y adorarle, sería bueno recordar. Dt.28:47,48: “Por cuanto no serviste a Jehová tu Dios con alegría y con gozo de corazón, por la abundancia de todas las cosas – Servirás por tanto a tus enemigos que enviare Jehová contra ti, con hambre y con sed y con desnudez, y con falta de todas las cosas, y él pondrá yugo de hierro sobre tu cuello, hasta destruirte”.
Servirle a Dios sin ganas e indiferente y de mala voluntad, es una maldición.
Jer.48:10. “Maldito el que hiciere indolente (sin gusto) la obras de Dios”
La alegría en un hombre oh en una mujer de Dios, debe ser notoria y contagiosa; aun cuando el servicio nos cueste lágrimas.
“Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo – Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos, porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros” Mt.5:11,12.
El Sal.126:5,6 dice: “Los que sembraron (sirven) con lágrimas con regocijo segaran – Irá andando y llorando el que lleva la preciosa semilla, más volverá a venir con regocijo, trayendo sus gavillas”
Lo que nos debe diferenciar a los siervos de Dios he hijos de Dios de otros servidores, es la alegría de corazón, y el regocijo espiritual.
Jesús se regocijó en el Espíritu alabando y sirviendo al Padre. Lc.10:21.
María se regocijó en su espíritu en Dios su salvador, por el privilegio de ser su sierva. Lc.1:47,48.
Los apóstoles salieron de la presencia del concilio gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer afrenta por causa del nombre (servir). Hch.5:41.
Debemos saber que nuestro gozo y alegría por servirle al Señor, trasciende también a nuestro cuerpo físico:
Nos recrea los huesos.Sal.51:8 dice: “Hazme oír gozo y alegría, y se recrearan los huesos que haz abatido”
Constituye buen remedio. Pr.17:22 dice: “Buen remedio es el corazón alegre, pero el ánimo triste resta energía” V.P.
Nos hermosea el rostro. Pr.15:13 dice: “El corazón alegre hermosea el rostro, más por el doler del corazón el espíritu se abate” La Biblia V.P. dice: “Corazón alegre cara feliz, corazón enfermo semblante triste”.
Este principio de servir con alegría a Dios y venir ante su presencia con regocijo espiritual, no debe fallar en el pueblo de Dios.
Hoy afirmemos nuestra alegría declarando: “Este es el día que hizo Jehová, nos gozaremos y alegraremos en él”
La Biblia V.P. dice: “Este es el día en que el Señor actuado, estemos hoy contentos y felices” Sal.118:24. Amén.
Dios te bendiga.
Jorsaaleza.
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