UNA EXHORTACIÓN PASTORAL EN BASE A Hch..20:17-38.
Este
es un mensaje de primera mano de un hombre con un corazón pastoral
extraordinario quien se atrevió a decir:
3. Porque nuestra exhortación no procedió
de error ni de impureza, ni fue por engaño, 4. Sino que según fuimos aprobados por
Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar
a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones (Gá.1:6-10). 5. Porque nunca usamos de palabras lisonjeras (Alabar de forma
exagerada y generalmente interesada a una persona para conseguir un favor o
para ganar su voluntad),
como sabéis, ni encubrimos avaricia; Dios es testigo; 6. Ni buscamos gloria de los hombres; ni
de vosotros, ni de otros, aunque podíamos seros carga como apóstoles de Cristo.
7. Antes fuimos tiernos entre vosotros, como la nodriza (Mujer encargada de
amamantar a un niño ajeno)
que cuida con ternura a sus propios hijos. 8. Tan grande es nuestro afecto por
vosotros, que hubiéramos querido entregaros no sólo el evangelio de Dios, sino
también nuestras propias vidas; porque habéis llegado a sernos muy queridos. 1Ts.2:3-8.
Pablo
amaba a la iglesia de Cristo, es por ello que trataba con responsabilidad con
los que tomaban el ministerio del pastorado, y Hch.20:17 comienza con esta
actitud y dice: Enviando,
pues, desde Mileto a Éfeso, hizo llamar a los ancianos de la iglesia.
Antes
de seguir adelante me gustaría recordar con ustedes y preguntarnos: ¿qué es
iglesia?
Primero
debemos de saber que la palabra iglesia se deriva del griego “Ekklesia” que originalmente significaba una asamblea
convocada, una reunión de personas con un propósito. (Hch.7:38-Congregacion),
Hch.19:32-Reunidos), Hch.19:39-41-Asamblea) 2Cr.5:3-Congregaron).
Sin
embargo Jesús usó esta palabra para designar a los suyos.Mt.16:18,18:17.
La
idea fundamental de la iglesia es la de una compañía de creyentes llamados del
mundo y habitados por el Espíritu de Dios, cuyo especial ministerio hacia Dios
es la adoración que se trasluce en obediencia, y hacia sus coomiembros la
edificación, exhortación y consolación.
Debemos
aclarar que nosotros somos miembros del cuerpo de Cristo que es su iglesia. La
iglesia está formada por un grupo de creyentes. No es que yo soy iglesia. Iglesia
es el conjunto de creyentes. Simplemente soy un miembro de la iglesia.
Esto
es importante para saber en que consta el ministerio pastoral o nuestro
ministerio.
Hoy
si volvamos a Hch.20:17-38. Y de todo esto quiero resaltar esa grandeza que
Dios nos comunica por este hombre llamado Pablo que no escatimó su propia vida
por amor a su Señor. Ejemplo que es digno de recibir, digno de vivir o
practicar y digno de compartir
Como
ya lo dijimos Pablo amaba a la iglesia de Cristo, es por ello que trataba con
los que tomaban responsabilidad del pastorado, es así que Hch.20:17 dice:
Enviando, pues, desde Mileto a
Éfeso, hizo llamar a los ancianos
de la iglesia.
Anciano
en la biblia también es un término que se usa para referirse a los pastores,
esto lo aclara 1P.5:1-4.
Fue
a ellos a quienes se dirigió hablándoles de su comportamiento diciendo:
vs.18-21.
Fue
a ellos a quienes les hizo ver que el amor a su Señor estaba sobre cualquier
sufrimiento, o cualquier cosa. Vs.22-24.
Fue
a ellos a quienes les advirtió de su ausencia pero cumpliendo el
deber.vs.25-27.
Fue
a los ancianos o pastores a quienes les dijo: vs.28.
Fue
a ellos a quienes les advirtió el peligro en la iglesia o congregación después
de su partida.vs.29-30.
Fue
a ellos a quienes les hizo recordar no solo su exhortación sino su amonestación
dolorosa.vs.31.
Fue
a los pastores a quienes los encomendó a Dios y a su Palabra.vs.32.
Fue
a los pastores a quienes les dijo: vs.33-35.
Fue
de los pastores de quienes se despidió orando, llorando y dando sus últimos
pasos hacia barco.
Este hombre fue digno de
decir: 7.
He peleado la
buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. 8. Por lo demás, me
está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en
aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida. Sin
duda alguna que así fue recibido en el cielo. Amén. 2Ti.4:7-8.
Jorsaaleza.
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