CRISTO SOLO CRISTO

CRISTO SOLO CRISTO

A él oíd (Mr.9:7, Lc.9:35), a él mirad (He.12:2), a él seguid (Mr.10:21), a él imitad (1Co.11:1), en él se complace el Padre (Mt.17), nuestra meta es vernos tal como Cristo y tener toda su perfección. (Ef.4:13).

Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación - Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Col.1:15-16.

Nadie puede ver a Dios, pero Cristo es Dios en forma visible (Jn.14:9-11). Él existe desde antes de la creación y es supremo Señor de toda ella - Con su poder creó todo lo que hay en el cielo y en la tierra, lo que se ve y lo que no se ve, ya sean ellos seres espirituales, poderes, autoridades o gobernantes. Todo ha sido creado por él y para él. Cristo existió antes que todas las cosas, y todo el universo sigue su curso gracias a él. A Dios le agradó que todo lo que él es habitara plenamente en Cristo. Col.1:15-17,19.

Cristo es la revelación o representación exacta de Dios. Primogénito es el título que se refiere a su prominente posesión, y no al momento que ocurre su nacimiento físico.

Cristo es el resplandor de la gloria de Dios, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas. He.1:3.

Toda la Escritura está plasmada de la revelación de Cristo, de una manera infalible y que no se puede obviar, menos quitar. Porque si así fuera no habría razón de la existencia (Cristo es la vida – Él sustenta todas las cosas.He.1:3. Todas las cosas por él subsisten. Col.1:17).

El primer libro de la biblia comienza con Cristo (Gn.1:1-3, Jn.1:1-2) y el último libro de la biblia termina con el “Amen” Ap.22:21. ¿Quién es el Amén? – Cristo. Ap.3:14.

La gloria y la sustancia divina del Padre es glorificada en Cristo su Hijo, del mismo modo el Espíritu Santo glorifica o da testimonio de Dios en Cristo.

Cristo dijo: Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria nada es; mi Padre es el que me glorifica, el que vosotros decís que es vuestro Dios - Ahora es glorificado el Hijo del Hombre, y Dios es glorificado en él. Jn.8:54,13:31.

También dijo: Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo (Jn.14:13). Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que también tu Hijo te glorifique a ti.Jn.17:1.

Jesús fue glorificado cuando vino el Espíritu Santo, así lo dice Jn.7:39. Y él también dijo: Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho. Jn.14:26. Pero cuando venga el Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, él dará testimonio acerca de mí. Jn.15:26. Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir - El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber - Todo lo que tiene el Padre es mío; por eso dije que tomará de lo mío, y os lo hará saber.Jn.16:13-15.

Por ello, y por el principio bíblico, nuestro mensaje debe ser Cristo céntrico. Cristo es el corazón de Dios y el corazón de la Palabra de Dios. La razón de ser, la razón de predicar para salvación a toda la humanidad.

Así lo entendieron todos los siervos de Dios desde el A.T hasta el N.T, y porque no decir también nosotros en estos tiempos contemporáneos y finales.

Pablo entendió que la grandeza de las buenas nuevas o mensaje de salvación; estaba fundamentado en la Roca que es el Cristo Crucificado, y que también podemos decir Resucitado. 1Co.2:1-5.

-  Cuando Pablo apenas se convirtió, lo primero que hizo fue predicar a Cristo.Hch.9:20.

-  La muchacha con espíritu de adivinación dijo: Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de salvación. ¿Quién es el camino de salvación? Cristo. Hch.16:17.

-  Apolos el predicador elocuente y poderoso en las Escrituras, demostraba que Jesús era el Cristo. Hch.18:24-28.

-  El diácono (Hch.6:5) evangelista Felipe, cuando fueron esparcidos por la persecución en Jerusalén, llegó a Samaria y poderosamente predicaba a Cristo a todo el pueblo (Hch.8:4-8).

Así mismo, estoy seguro que ese encuentro  que tú has tenido con Cristo jamás lo podrás o podremos olvidar.

Debemos recordar que todo cristiano es un embajador de Cristo (representantes).2Co.5:20. Pero mantengamos nuestra humildad.

Pablo aunque preso no perdió su posesión de embajador, pero humildemente pidió oración a la iglesia, para que hablara con denuedo (intrepidez, valentía) de Cristo como debía hablar.Ef.6:20.

CRISTO SOLO CRISTO. No estoy hablando de la religión llamada solo Jesús.

Estoy hablando del fin de la ley. Cristo, quien fue aprobado por Dios para que la justicia de la salvación llegara a todo aquel que en él cree. Ro.10:4.

Este Jesús o Cristo,  es la piedra que ustedes los constructores rechazaron, se ha convertido en la piedra principal – Solo en Jesús o en Cristo hay salvación, no hay otro nombre bajo el cielo o en este mundo, por lo cual los seres humanos podamos ser salvos.Hch.2:11-12.

Cristo es ciertamente la realización perfecta de todo lo que pide la ley, eso hizo poner fin a la ley, pero como vía de alcanzar la justicia (salvación) para los creyentes.

Cristo al llenar los requerimientos de la ley, satisfizo los reclamos o condiciones divinas.

Sin embargo, los creyentes no deben ignorar las normas morales o los mandamientos de Dios.

Por eso pregunto para esclarecer el caso: ¿Qué, pues? ¿Pecaremos, porque no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia? En ninguna manera - ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia? - Pero gracias a Dios, que aunque erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a aquella forma de doctrina a la cual fuisteis entregados - y libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia. Ro.6:15-18.

Cristo es justicia de Dios (Ro.3:21-24), Cristo es poder y sabiduría de Dios (1Co.1:23-25). Cristo es ungido (Jesús) Salvador. Oh Dios es mi Salvación.

La biblia dice: Aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos) Ef.2:5. Cristo nos salvó, nos hizo nacer de nuevo (Jn.3:3-6), nos dio nueva vida (2Co.5:17). La misma que siempre irá al margen de la verdad que santifica (Jn.17:17).

La meta de nuestra medida o estatura es la plenitud de Cristo, convertirnos en gente madura, vernos tal como Cristo y tener toda su perfección (Ef.4:13).

Pablo no sabía cómo expresar el amor hacia los hermanos de Galacia, cuando dijo: 20Cómo quisiera estar ahora entre ustedes y hablarles de otra forma. Pero como está la situación ahora, yo no sé qué más decirles - 19Hijos queridos, otra vez sufro por ustedes como una madre que da a luz hasta que en realidad sean como Cristo. Gá.4:20,19.

En la mente, en el corazón y en la vida de Pablo solo estaba Cristo. Sus palabras expresaban esta verdad: Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.Gá.2:20. Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.Fil.1:21.

Para el hijos de Dios, para el creyente y para el siervo fiel, no hay otra cosa que solo mirar a Cristo (He.12:2), no hay otro ejemplo a imitar y seguir solo Cristo (1P.2:21 1Co.11:1).

Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él. (Obedeced).Col.2:6. Porque habéis muerto y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.Col.3:3.

Estamos muertos al pecados, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro.Ro.6:11.

CRISTO SOLO CRISTO es el fin de cada creyente, y cada ministro debe de saber que todo su trabajo o que hacer en el Señor debe apuntar a perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo – A tal manera que los creyentes se vean como Cristo y tengan su perfección (Ef.4:12,13).

En realidad el fin o lo que importa no es la condición ritual de una persona, sino si esta ha nacido de nuevo, oh es una nueva creación que Dios está haciendo. Gá.6:15, u obrando como dice Fil.1:6. Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo.

Pablo con ese gran corazón termina el capítulo uno de Colosenses diciendo: Nosotros damos a conocer a Cristo a todos, aconsejándoles y enseñándoles con toda la sabiduría que Dios nos da, pues queremos presentarlos a todos ante Dios espiritualmente maduros en Cristo - A tal fin trabajo con mucho empeño gracias al poder de Cristo que actúa en mí y me fortalece.Col.1:28-29.

Pablo comprendió desde los inicios su llamado y asumió con gran responsabilidad la meta divina en su vida y en la vida de sus hermanos para ser como Cristo.

Pablo tenía un corazón de Pastor, y Pastor de Dios u obrero de Dios. Pablo se mantenía en la presencia de Dios, su vida espiritual era expresada al cumplimiento de un adorador.

Adorador al margen de la obediencia a la verdad como el Patriarca Abraham (Gn.22:1-19), con una disposición de mente y de corazón sincero o verdadero y de acuerdo con el mandato bíblico, como dice Jn.4:23-24.

La lucha del apóstol como ministro de Dios era con huestes invisibles, pero a la vez reconocía la fuerza del mal en los actos visibles expresados por los falsos predicadores.

En el cap.2:1-10 de Colosenses podemos ver su lucha su anhelo y su proceder.

Lucha con las fuerzas de las tinieblas, pero confronta los argumentos de los falsos, u obreros fraudulentos que se disfrazan como siervos de Cristo (2Co.11:13-15). Vs.1.

El propósito del apóstol estaba claro, y era específico. Vs.2-3.

Pablo visionaba a los hermanos con una fe verdadera. Él sabía que los engaños no solo son por visiones y acciones, sino también por argumentos o enseñanzas erróneas o con malas intenciones. Vs.5, 4,8.

Por eso 1P.4:11 dice: Si alguno habla, hable conforme a las palabras de Dios; si alguno ministra, ministre conforme al poder que Dios da, para que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén.

El apóstol Pablo tenía muy presente bestas palabras, por ello su corazón de pastor como verdadero siervo de Cristo estaba enclavado en el fin, de allí sus exhortaciones y el desvelo de su amor, para ser como Cristo. Vs.6, 7-10.

Si Cristo no es el objetivo o fin de un hombre en el servicio de Dios, debe saber lo que le espera.

Si Cristo está en el último lugar de tu vida nada tendrá valor, nada te va a satisfacer o ser suficiente.

Pero si Cristo, y solo a Cristo lo pones en el primer lugar de tu vida y tus quehaceres. Todo lo que haces lo vas a disfrutar. Toda tu vida, todo lo que haces y tienes tendrá sentido. Amén.

Dios te bendiga. Jorsaaleza.

Categories: