LAS LÁGRIMAS EN LA BIBLIA
Jn.16:20-22.
De cierto, de cierto os
digo, que vosotros lloraréis y lamentaréis, y el mundo se alegrará; pero aunque
vosotros estéis tristes, vuestra tristeza se convertirá en gozo. 21 La mujer cuando da a luz, tiene
dolor, porque ha llegado su hora; pero después que ha dado a luz un niño, ya no
se acuerda de la angustia, por el gozo de que haya nacido un hombre en el
mundo. 22 También
vosotros ahora tenéis tristeza; pero os volveré a ver, y se gozará vuestro
corazón, y nadie os quitará vuestro gozo.
Mt.5:4. “Bienaventurados los que lloran, porque ellos
recibirán consolación”.
Es muy popular la idea
de que llorar es cosa de mujeres o de niños.
De allí la idea de que
el hombre que es hombre no llora.
Apezar de que la
opinión es común, esta errada, porque la biblia implica que los mejores hombres
lloran más fácilmente.
Primeramente notemos
que no es ningún cualquiera quien dice: “Bienaventurados los que lloran”.
Fue el propio
Jesús, el mejor hombre
que ya piso esta tierra que no escondió sus lágrimas delante de una multitud de
judíos, entre ellos María y Marta hermanas de Lázaro (muerte): La biblia dice:
“Jesús lloró” Jn.11:35.
Que importante es ver
que no solo nuestras acciones están registradas en la memoria de Dios, sino
también nuestras lágrimas.
En cuanto a
esto dice David: “Mis huidas tú has contado; Pon mis lágrimas
en tu redoma ¿No están ellas en tu libro?” (Tú has visto mis sufrimientos; has recogido mis lágrimas ¿Acaso no
tienes todo esto registrado en tu libro?).Sal.56:8.
La biblia a pesar de ser un libro alegre por su origen divino, muchas
veces tiene sus páginas humedecidas por las lágrimas, a medida que ella se
identifica con la humanidad.
A lo largo de sus páginas están registradas las lágrimas de diferentes
personas, por diferentes motivos. En ellas leemos sobre:
1. Las
lágrimas de un hermano
2.
Las lágrimas de un profano
3.
Las lágrimas de un amigo
4.
Las lágrimas de una congregación
5. Las
lágrimas del Salvador
I.
LAS
LÁGRIMAS DE UN HERMANO
Narración Gn.41 al cap.45.
1. Faraón
gobernaba como rey en Egipto y tuvo un sueño
7 vacas gordas y hermosas, y 7 vacas flacas y fea
7 espigas hermosas y, 7 espigas menudas y abatidas por el viento
Faraón estaba turbado de espíritu y mandó llamar a todos los magos y
sabios para descifrar el sueño, y ninguno le interpreto el sueño
Faraón supo de José y lo mando llamar
José interpreto el sueño de Faraón – 7 años de abundancia y 7 años de
escases y así fué.
2. Faraón lo
pone como gobernador de Egipto a José y le da toda autoridad – Solo en el trono
era mayor Faraón.
En los años de abundancia José almacenó mucho alimento
Luego llegó la escases y los habitantes comenzaron a clamar por el hambre,
también llegaron gentes de otros pueblos.
3. Los hijos
de Jacob que son hermanos de José viajaron de Canaán a Egipto por alimentos.
José los reconoce y comenzó hacer algunas acciones para ver si sus
hermanos lo reconocían o lo traían a la memoria.
José les invita para comer con ellos, y allí sucede un caso.
Texto
clave: Gn.45:1-5.
No podía ya José contenerse delante de todos los que estaban al lado suyo, y
clamó: Haced salir de mi presencia a todos. Y no quedó nadie con él, al darse a
conocer José a sus hermanos. 2 Entonces se dio a llorar a gritos; y
oyeron los egipcios, y oyó también la casa de Faraón. 3 Y dijo José a sus hermanos: Yo soy
José; ¿vive aún mi padre? Y sus hermanos no pudieron responderle, porque estaban
turbados delante de él. 4
Entonces dijo José a sus hermanos: Acercaos ahora a mí. Y ellos se acercaron. Y
él dijo: Yo soy José vuestro hermano, el que vendisteis para Egipto. 5 Ahora, pues, no os entristezcáis, ni
os pese de haberme vendido acá; porque para preservación de vida me envió
Dios delante de vosotros.
JOSÉ AL LLORAR DELANTE DE SUS
HERMANOS ABRIÓ EL CORAZÓN DE ELLOS EN UNA DEMOSTRACIÓN DE TERNURA Y AMOR
PERDONADOR ¡BENDITAS LÁGRIMAS LAS DE JOSÉ!
II.
LAS
LÁGRIMAS DE UN PROFANO
Narración Gn.25:19 al 27:38.
1. Estando
Esaú por el campo, Jacob prepara un guiso
2. Llega Esaú
y le pide del guiso. Jacob le dice véndeme tu primogenitura
3. Para Esaú
el derecho de las bendiciones de la primogenitura no tenían valor. El mira el
presente y no el futuro – De esa manera cambio su primogenitura por un plato de
lentejas preparadas por Jacob, quien miraba el futuro.
4. Después
sintiéndose Esaú atraído por Jacob que recibió las bendiciones en su lugar
La biblia dice: “Y alzo Esaú su voz y lloró”
5. Debemos de
tomar en cuenta para advertirnos el peligro y no nos acontezca el mismo caso.
Texto
clave He.12:16,17. No
sea que haya algún fornicario, o profano, como Esaú, que por una sola comida
vendió su primogenitura.17
Porque ya sabéis que aun después, deseando heredar la bendición, fue desechado,
y no hubo oportunidad para el arrepentimiento, aunque la procuró con lágrimas.
LAS LAGRIMAS DE ESAÚ AUNQUE ENVIDIABLES DE NADA VALÍAN, SINO
EXPRESABAN CONTRISTACIÓN O ARREPENTIMIENTO, AÚN NO HABÍA OPORTUNIDAD AUNQUE
DEMOSTRABA REMORDIMIENTO.
III.
LAS
LÁGRIMAS DE UN AMIGO
Narración 2S.1:1-27.
1. Tan luego
que David supo de la muerte de Saúl y Jonatán. David se lleno de profunda
tristeza y lloró (2S.1:11,12. Entonces David, asiendo de sus vestidos, los
rasgó; y lo mismo hicieron los hombres que estaban con él. 12 Y lloraron y lamentaron y ayunaron hasta la noche,
por Saúl y por Jonatán su hijo, por el pueblo de Jehová y por la casa de
Israel, porque habían caído a filo de espada).
2. La
referencia bíblica registra el dolor y la tristeza cantada por David en
homenaje a sus 2 tan queridos amigos 2S.1:17-27.
3. Principalmente
el amor que le tenía a Jonatán, en medio de sus lamentos dice:
Angustia tengo por ti, hermano mío
Jonatán, que me fuiste muy dulce. Más maravilloso me fue tu
amor que el amor de las mujeres. 2S.1:26.
1S.20:17 dice: Y Jonatán hizo jurar a
David otra vez, porque le amaba, pues le amaba como a sí mismo.
SOLO EL AMOR DIVINO ERA
CAPAZ DE MOVER EL CORAZON DE ESTE VALIENTE GUERRERO, DANDOLE LA TERNURA Y EL
AMOR DEL CORAZON DE UN NIÑO.
IV.
LAS
LÁGRIMAS DE UNA CONGREGACIÓN
Narración de Esdras
1. Regresando
del cautiverio Esdras llega a Jerusalén
2. La triste
situación de la ciudad y sus habitantes le causa tristeza al corazón
3. Como fiel
intercesor tomo como sus pecados los pecados del pueblo, y también la
congregación lloró.
Esd.10:1
dice: Mientras oraba
Esdras y hacía confesión, llorando y postrándose delante de la casa de Dios, se
juntó a él una muy grande multitud de Israel, hombres, mujeres y niños; y
lloraba el pueblo amargamente.
COMO RESULTADO DE SUS LAGRIMAS LA CONGREGACION DE ISRAEL HIZO
UNA PROMESA Y CONFESO SUS PECADOS Y OFRECIO OFRENDA DE ALABANZA A DIOS.
Esto pasó
como muestra de arrepentimiento verdadero. Esd.10:17-19 dice: Y
terminaron el juicio de todos aquellos que habían tomado mujeres extranjeras, el
primer día del mes primero.18
De los hijos de los sacerdotes que habían tomado mujeres extranjeras, fueron
hallados estos: De los hijos de Jesúa hijo de Josadac, y de sus hermanos: Maasías,
Eliezer, Jarib y Gedalías.19
Y dieron su mano en promesa de que despedirían sus mujeres, y ofrecieron como
ofrenda por su pecado un carnero de los rebaños por su delito.
V.
LAS
LÁGRIMAS DEL SALVADOR.
1. Cerca para
terminar su ministerio en esta tierra coronado con su muerte en el monte de los
olivos, Jesús contempla la ciudad de Jerusalén y: “Lloró sobre ella” Lc.19:41.
- Por no
saber aprovechar la visitación del Mesías. Lc.19:42. Siendo una ciudad de tanto
privilegio - Testiga del ministerio de, los profetas. Lc.13:34-35. A quienes mataron
y apedrearon a la medida de sus iniquidades.
- Despreciando
así, aquel que venía a salvarlos.
- Jesús dijo:
¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas, y apedreas a los que te son
enviados! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina a sus polluelos
debajo de sus alas, y no quisiste! - He aquí, vuestra casa os es dejada
desierta; y os digo que no me veréis, hasta que llegue el tiempo en que digáis:
Bendito el que viene en nombre del Señor. Lc.13:34-35.
2. ESA
TAN GROSERA Y ACTITUD DEL PUEBLO PARTIA EL CORAZON AMOROSO DEL SALVADOR
PROVOCANDOLE LAS LÁGRIMAS. POR ESO DICE: “LLORÓ SOBRE ELLA”.
Estas lágrimas deben marcar nuestros corazones como muestra de
integridad y profundo amor; a acepción
de las lágrimas de Esaú, quien fue desechado, y no hubo oportunidad para el arrepentimiento,
aunque la procuro con lágrimas.
Amen.
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