Ps.Jorge Saavedras Lezama
LA EXCELENTE EXALTACIÓN A LA PALABRA DE DIOS
Exaltar la palabra de Dios
es reconocer su excelente alteza divina, y única en la existencia. Esto es
reconocer a Dios como único.
El salmos 119 es un escrito
excelente para exaltar al Dios de la grandiosa e incomparable palabra excelente
como única respuesta a todas las inquietudes descubiertas y por descubrir y
vivir de la humanidad.
Dios ha puesto en mi corazón
exponer este mensaje explicando aspectos de importancia para la vida terrenal
con una trascendencia celestial y eterna.
Desde esta perspectiva
bíblica expongo la revelación de la excelencia de la ley de Dios, según el
salmos 119 para entender y obedecer, de tal manera que podamos experimentar los
aspectos que desarrollaremos en el proceso del mensaje.
Por lo tanto exponemos el
tema:
N° 1.- LA CLAVE DE LA FELICIDAD
La biblia tiene el propósito
de hacernos saber la voluntad de Dios: Llamándonos, abriéndonos la puerta y
mostrándonos el camino o la manera de vivir, para volvernos y morar con Dios
eternamente y para siempre.
Ella nos abre el camino a la
verdadera felicidad.
Felicidad es el espacio que
de una u otra manera todos los seres desean y buscan.
Algunos, parecen haberla
alcanzado con los sentimientos y sensaciones de satisfacción; pero de inmediato
se escapa como el aire entre los dedos porque es efímera.
Es de importancia
esclarecerle a la humanidad que el medio que brinda la verdadera felicidad, trayecto
a la perfección, es la palabra de Dios, la puerta a esta verdadera felicidad, es
Jesús.
Pero nadie abre la puerta
para quedarse estático en ella, debemos avanzar en el camino, y esta es la
clave de la verdadera felicidad: Atentos para escuchar, listos para entrar y
seguros para caminar bajo las órdenes del Señor; esto es: “Cumplir la voluntad de Dios, tal cual, ésta se revela en
su palabra”.
Desde esta plataforma bíblica
según el salmo 119. Hoy solo trataremos los ocho primeros versos que comienzan
o son encabezados con la primera letra del alfabeto hebreo “Alef” y así sucesivamente.
(Nota: Es sorprendente este
capítulo (poema) tiene 22 estrofas, y cada una de ellas tiene 8 versos, y son
encabezados por una letra del alfabeto hebreo, y todos estos versos exaltan la
palabra de Dios).
Comencemos leyendo los 8
primeros versos. Luego: Tomaremos nota de una corta explicación de cada uno de
ellos.
Vs.1. Aquí el verso nos indica la felicidad o la
ventura de los que andan en: Pureza y siguen las enseñanzas del Señor.
Jesús dijo: Bienaventurados los de limpio
corazón, porque ellos verán a Dios. Mt.5:8.
He.12:14.Seguid la paz con todos, y la
santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Vs.2. Se repite la dicha pero enfatiza el principio: Obedecer los mandamientos y buscar a Dios de todo corazón.
Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está
cercano (Is.55:6).
David
dijo: Una
cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; Que esté yo en la casa de Jehová todos
los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo. Esto es
buscar el rostro de Jehová. Sal.27:4.
2Cr.7:14 dice: Si se
humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren
mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados,
y sanaré su tierra.
Vs.3. La actitud de los que disfrutan la verdadera
felicidad es: Apartados del mal por la eficacia de vivir bajo el mandamiento del Señor, oh
mejor dicho son temerosos de Dios.
Uno de estos hombres era Job. La biblia dice: Hubo en
tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal. Job.1:1.
Aquí, memorizar las enseñanzas del Señor es de suma
importancia, esto nos puede librar apartándonos del mal.
El Sal.119:11 dice. En mi corazón he guardado (memorizo)
tus dichos para no pecar contra ti.
Vs.4. Se nos ha confiado la palabra de Dios siendo instruidos en ella; pero para obedecerla al pie de
la letra. Esto es fidelidad.
El mensajero fiel oh la fidelidad a la palabra de Dios
trae salud o soluciones a las situaciones. Pr.13:17.
El apóstol Pablo le dice a Timoteo: Tú, pues, hijo mío, esfuérzate en la gracia que es en Cristo
Jesús - Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a
otros. 2Ti.2:1,2.
Dios
nos instruye y nos ha confiado su palabra dándonos la gran comisión: Por tanto, id, y haced discípulos
a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del
Espíritu
Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he
mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del
mundo. Amén. Mt.28:19,20.
Vs.5. La vida del hombre feliz junto a su Señor,
solo apunta a obedecer, y a la vez se confronta con la ley excelente de Dios (P.
de D) para vivir cada día de la mejor manera. Esto es crecer espiritualmente (madurez).
Santiago
nos amonesta a que no debemos ser oidores olvidadizos de la palabra de Dios, sino hacedores perseverantes de ella,
para ser felices. Stg.1:22-25.
Solo
cuando disfrutamos de una lámpara encendida podemos avanzar en el camino o crecer espiritualmente.
Lámpara es a mis pies
tu palabra, Y lumbrera a mi camino.Sal.119:105.
Solo
por ella podemos crecer espiritualmente. 1P.2:2,3. Desead, como niños recién nacidos, la leche
espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación=(así podrán
crecer y ser salvos) - si es que habéis gustado la benignidad del Señor=(si han
saboreado lo bueno que es el Señor).
Solo
ella nos salva, Solo ella nos santifica. Jn.17:17. Solo ella nos liberta. Jn.8:32. Solo ella nos
sana y nos libra de la ruina. Sal.107:20, etc.
Vs.6. El que disfruta de la verdadera felicidad es
muy sensible cuando estudia los mandamientos de su Señor (P. de D). Tanto
es que el menos movimiento de fallar a su Señor, le da vergüenza, y no solo se
compunge sino que cambia de inmediato su manera de vivir.
Vs.7. Un hombre feliz de verdad oh en la verdad, es un hombre con un
corazón agradecido. Y reconoce que el principio de su felicidad es el haber
aprendido y poner en práctica los justos juicios de Dios (P. de Dios).
David
escribiendo los salmos rebosa de agradecimiento y lo expresa con
mucha alegría oh felicidad. Él dice:
Has cambiado mi
lamento en baile; Desataste mi cilicio, y me ceñiste de alegría - Por tanto, a
ti cantaré, gloria mía, y no estaré callado. Jehová Dios mío, te alabaré para
siempre.Sal.30:11,12.
Envía tu luz y tu
verdad; éstas me guiarán; Me conducirán a tu santo monte, Y a tus moradas -
Entraré al altar de Dios, Al Dios de mi alegría y
de mi gozo; Y te alabaré con arpa, oh Dios, Dios mío. Sal.43:3,4.
Este hombre era
sumamente agradecido por haber aprendido los juicios de Dios.
Jesús ante
la tumba de Lázaro expresa agradecimiento como señal de su relación con Dios el
Padre.Jn.11:41,42.
Vs.8. Un hombre feliz de verdad y de todo corazón es un hombre que
reconoce que al abandonar la obediencia a la palabra de Dios, es ser abandonado
por Dios.
Ejemplos de esta
índole hay muchos en la biblia. Dt.31:17,32:20, Esd.8:22,1Ti.1:19,20.
Por ello la única
decisión con una actitud correcta hacia Dios y su palabra es obedecer la
excelencia de la ley divina.
Nuestra
obediencia purifica nuestras almas. 1P.1:22
Como hijos
obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra
ignorancia - sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros
santos en toda vuestra
manera de
vivir - porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo. 1P.1:14-6.
Solo la palabra de
Dios en obediencia, es la clave de nuestra felicidad, ella es la que:
Convierte oh
reconforta el alma – Al
ignorante lo hace sabio.
Alegra el corazón oh
hace feliz a la gente – Muestra el camino correcto a seguir.
Permanece para
siempre – Es verdad, justa y absolutamente correcta.
Vale más que el oro
refinado – Es más dulce que
la miel salida del panal.
Nos amonesta, y
previene de todo – Al obediente le recompensa. Sal.19:7-11.
peligro a quienes la
respetan.
Que más
felicidad desea usted que esta? la clave está en amar (obedecer) a Jesús.
Jn14:15.
Felicidad es el espacio que
de una u otra manera todos los seres desean y buscan.
Hoy es el momento de
recapacitar y entronar la felicidad en nuestro corazón.
Un Padre amoroso inigualable
e inconfundible como Dios, desea que todos sus hijos sean felices. De allí la
revelación de su santa voluntad por su palabra. Hecho que al vivirla genera inconfundible
felicidad, trayecto a la perfecta eternidad.
Mi amigo y hermano hay
cuántas vidas desperdiciadas buscando lograr una felicidad que ya se tiene (Jesús)
pero que muchas veces no la vemos.
La verdadera felicidad consiste en amar lo que tenemos (Jesús), y no sentirnos mal por aquello que no tenemos.
La verdadera felicidad consiste en amar lo que tenemos (Jesús), y no sentirnos mal por aquello que no tenemos.
Si lloras por haber
perdido el Sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas".
Nuestra meta se
consumará solo mirando a Jesús, el autor y consumador de nuestra fe
inquebrantable, quien en vez del gozo que podía haber tenido sufrió la muerte
en la cruz, y aceptó la humillación como si no fuera nada, y se sentó a la
diestra del trono de Dios. He.12:2.
¡LA FELICIDAD ES UN
TRAYECTO, NO UN DESTINO! Nuestro destino es más que eso,es la perfecta
adoración a Dios. Allí seremos perfectamente felices.
Esto lo disfrutaremos
en el cielo.
Dios
le bendiga
Jorsaaleza.
Nuevo Chimbote 10/07/13.
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